Una imagen vale más que mil palabras, la primera impresión es la que vale, nunca hay una segunda oportunidad para dar una primera impresión. No son sólo frases hechas, la importancia de la imagen en una marca es innegable, y en nuestra época actual ha ganado valor de manera exponencial dentro del marketing online. Y te hablo sobre la imagen de marca, lo que conocemos como Branding, en el que el tono y el estilo que irradies definen tu marca, pero no sólo estos, tu personalidad y propósito son también consecuencia de tu imagen. El logo, la tipografía, el color que usamos en nuestra comunicación visual nos diferencia como marca. Pero además del branding, propiamente dicho, las imágenes las usarás para realizar publicaciones en redes sociales, en tu web, en tu email marketing, así como en tus campañas publicitarias. En definitiva, lo que muestres es lo que eres, y hay que cuidar esta faceta que es vital para tu negocio.

El valor de tu imagen y tus imágenes

Imagina que vas a una entrevista de trabajo, normalmente cuidarás tu imagen para que después puedas seguir hablando sobre tí y tu trabajo, porque precisamente sabemos que si la imagen no es la adecuada, puede que no tengamos la oportunidad de dar valor a lo que hay detrás. De la misma manera tampoco nos podemos quedar en la imagen, si detrás de una buena imagen no hay nada, tampoco llegarás muy lejos. Pero es innegable la importancia que tu presencia tendrá en tu negocio.

Para conectar con tu audiencia

Como comentamos en nuestro artículo Cómo crear contenido para redes sociales, las imágenes, los vídeos, las infografías suponen los formatos de comunicación que más atención atraen. A ello hay que sumar tu logo, y cómo armonices toda tu comunicación para mostrarte cómo has decidido que quieres hacerlo. Las imágenes se consideran un medio emocional, el poder de la imagen para vender a través del corazón es incontestable. Si eres capaz de llegar con una imagen, reforzada por el mensaje que quieres comunicar, conquistarás al público. En tu web del negocio, en tus publicaciones en redes o en los anuncios que publiques, ambas cosas van de la mano.  El copy y la imagen son un equipo que mejora la impresión en el usuario y lo prepara para decidirse por tu producto. Si quieres oír la opinión de Carmelo Beltrán, copywriter, puedes oír este podcast de sólo 14 minutos.    También debes considerar que las imágenes simplifican y agilizan el proceso de adquisición de la información, reduciendo el tiempo que nuestros clientes deben pasar leyendo, cosa que muchos consideran aburrido.

Para diferenciarte 

Como he empezado diciendo el branding o imagen de marca es un hecho diferenciador, sí, pero que hay que trabajar de manera continua desde el marketing de contenidos. Las grandes marcas se esfuerzan por tener y mantener esa imagen que les diferencia, e intentan que en cada una de sus acciones visuales sean reconocidas por el público. Piensa en gigantes como Apple, Nike , Coca Cola o Mercadona, su imagen es reconocible en cualquiera de las comunicaciones que realizan y se esfuerzan para ello. Pero para ti también es muy importante, no vamos a conseguir el logo de Nike, que no necesita ningún texto en esa imagen para que en el mundo entero se sepa que se trata de uno de sus productos. Lo que si puedes, y debes, conseguir es tener una línea de imagen que te represente y te distinga. Como siempre, todo al final se enlaza en el marketing digital, debes tener claro a tu público objetivo, tus ‘buyer persona’ , tener clara tu filosofía, tus objetivos. A partir de aquí construir tu historia, decidir tu estilo y tono de comunicación, y aplicarlo a la imagen e imágenes. Sin aspirar a ser la Coca Cola, se puede trabajar en una forma de comunicar en la que te reconozcan tus potenciales clientes, tener una línea clara que te represente y sobre todo que los usuarios te perciban por lo que eres y lo que les ofreces.

Para posicionarte

Como sabes, el posicionamiento es un concepto que aparece por todos lados en estos tiempos digitales, en gran medida por el posicionamiento que se refiere en cómo apareces en los buscadores respecto a las búsquedas de tu marca, productos o palabras clave relacionadas con tu negocio, lo que se conoce como SEO Pero también es posicionamiento, el tradicional, cómo se encuentra tu empresa, marca o negocio en la percepción del público. Para ambos conceptos de posicionamiento la imagen e imágenes cuentan, y mucho. Incluso en muchos casos dependen uno del otro y se retroalimentan tanto positiva como negativamente. Imagina que vendes productos de alimentación que son de nuestra tierra y se consideran de calidad respecto a los que se pueden adquirir en grandes superficies, más artesanos y de mayor proximidad. (aquí podría poner una referencia a la Despensa del castillo, su web o su facebook por ejemplo) En el caso de posicionamiento respecto a tus clientes, lo primero es que el valor de tu empresa, en este caso ofrecer productos de calidad y cercanía, se vea reflejado en tu web, en tus redes, en tus catálogos, y por supuesto en tu tienda física. Tener una identidad de marca definida. Unas fotos de calidad que muestren los productos lo más próximo a tenerlos delante, cuidando la luz, el brillo, el contraste, la saturación. Un enfoque de los productos en esas imágenes para hacerlas atractivas dándoles el protagonismo. Un buen uso de los textos, respecto a las tipografías usadas, su posición en la imagen, su mensaje.  Ese cuidado de la imagen y las imágenes usadas refuerzan el valor que los clientes le dan a su tienda de confianza y atrae a los que aún no lo son, dado que les sugiere calidad y buen hacer. Se identificarán con la marca la próxima vez que se la encuentren. Respecto al posicionamiento SEO, de la misma manera que con los clientes, Google da valor a las páginas que son relevantes para los usuarios. Una buena experiencia de navegación, con imágenes atractivas, vídeos corporativos de calidad, harán que los visitantes de la página se queden más tiempo en ella. El uso de contenidos visuales en nuestras webs son de por sí un elemento valorado por la plataforma para su posicionamiento SEO. Para ello estas imágenes deben tener un tamaño idóneo, estar tituladas y descritas idóneamente, armonizadas en la arquitectura de nuestra web. 

Consejos para trabajar tus imágenes

 Por último me voy a centrar en aconsejarte cómo tratar tus imágenes tanto en tu web como en tus publicaciones en redes sociales.  El Branding, del que te he hablado y al que debes darle una gran importancia, lo dejaremos para un post futuro, todo no se puede asimilar a la vez.

De dónde sacas las imágenes

La fuente de las imágenes que uses en tu web o redes puede tener dos posibilidades, propias y ajenas. Dentro de las ajenas tienes varias posibilidades, tomarlas de internet, acudir a bancos de fotos privados o acudir a bancos de fotos gratuitos. La mejor opción para mí es obtener fotos propias, pero no siempre es posible. Para conseguir imágenes de calidad, incluso ahora que la calidad de las fotos ha mejorado tanto para cualquier dispositivo del que todos disponemos, sería muy aconsejable acudir a la fotografía profesional. Pero además, no siempre es posible obtener las fotos que necesitamos, imagina que quiero hacer una creatividad en la que necesite la foto de un volcán en erupción, por muy profesional que fuese realizando mis capturas iba a tener complicado llegar hasta ahí y pillarlo en plena acción. Los bancos de fotos nos ofrecen estas posibilidades, los de pago cuentan con un mayor inventario, pero en ambos tenemos una enorme cantidad de fotos de todas las temáticas que busquemos con una calidad óptima. De los gratuitos te sugiero UnplashPexels y Pixabay, de las de pago Shutterstock es de las más conocidas. Sobre tomar imágenes de internet lo que tienes que tener en cuenta es que sean contenidos libres de derechos. Al igual que es obligatorio contar con un aviso legal y una política de privacidad en nuestra web, también debemos tener en cuenta no utilizar contenido protegidos por derechos de autor.

Técnicas para optimizarlas

Para que tus imágenes consigan mantener esa línea que distinga a tu negocio y permita a los usuarios reconocerte y valorarte, además de por tu buen hacer como empresa, por como cuidas tu aspecto, debes tener en cuenta: Mantener el estilo, una vez que sabes qué quieres transmitir y cómo hacerlo, debes ser coherente y seguir ese camino. Por ejemplo, mantener siempre el mismo brillo o contraste en todas tus imágenes. Uso correcto de los colores, al igual que el color que hayas elegido para tu marca debe transmitir lo que es, las imágenes que uses deben estar en esa misma línea de color. Te dejo aquí este interesante artículo sobre la psicología del color en el marketing, en el que podrás ver que expresan los diferentes colores y cómo las marcas lo usan para definirse. Sencillez, el más que repetido ‘Menos es más’ que citó en su día el arquitecto Mies Van der Rohe, y que actualmente también se tiene muy en cuenta en el diseño. Para contar tu mensaje ve al grano, no lo entorpezcas con distracciones. Jerarquía, de la misma manera que la sencillez, destaca el mensaje principal de los secundarios. La pirámide invertida, como técnica periodística para atraer y mantener la atención del lector, es también idónea cuando lo que pretendes es llamar la atención de un usuario hacia tu producto. 

Requisitos técnicos de la imagen

A tener muy en cuenta cuando agregas imágenes en tu web o en las redes sociales. En cuanto a requisitos técnicos me refiero básicamente a estos tres conceptos: Tamaño, normalmente viene representado en píxeles y debes tener muy claro en qué ubicación vas a colocar una imagen, dado que cada una tiene unas dimensiones de escaparate que puede destrozar tu creatividad. Sabrás que no es lo mismo el marco que ofrece el muro de Facebook o el feed de Instagram por ponerte un ejemplo.  No voy a describirte las distintas dimensiones de cada ubicación, sea web o cada una de las redes sociales, pero te dejo este enlace a un artículo de @IGarcia donde nos presenta el Tamaño de las imágenes en redes sociales en 2020. Resolución, la calidad de la imagen en otras palabras, se trata del número de píxeles que tiene una imagen por pulgada, que es precisamente en lo que se mide, ppp. Lo que debes saber es que para las pantallas de ordenador como para las pantallas de nuestros móviles es suficiente con una resolución de 72 píxeles por pulgada. Piensa que si le das a las imágenes una resolución mayor, ganará calidad y será más nítida, pero el peso o tamaño del archivo será también mayor, y puede que den problemas para cargarlas. Formatos, el último aspecto técnico que te traigo para que tengas en cuenta es el formato de la imagen. Tanto si la descargas de tu propia cámara como de un banco de fotos de internet ten en cuenta el formato del archivo. Los más usados son .jpg, .png, .gif, .bmp, .tif. Cada formato tiene su uso por ejemplo para animaciones usamos .gif. Sobre ellos sólo quiero indicarte una relación calidad-tamaño entre los más usado en fotos, siendo .jpg el más liviano de tamaño pero el de menos calidad debido a la pérdida provocada por la compresión, y .png algo mayor pero sin tanta pérdida de datos pese a su compresión. 

Conclusiones

No voy a extenderme mucho más sobre lo comentado pero si voy a recordarte que las redes o tu web son la extensión de tu escaparate, y de cómo luzca dependerá cuántos transeúntes digitales se paren a verlo o entren. Desde La Guía de Sevilla te animamos a que no dejes pasar las oportunidades que el mundo del marketing digital y su proyección pueden ofrecer para revitalizar tu negocio, abrirle nuevos horizontes, o mantenerlo en un estado de salud óptimo. Si necesitas algo, ya sabes, contacta.